-En los últimos meses unos 60 investigadores de diversos departamentos han perdido su trabajo y decenas de proyectos sanitarios relacionados con el estudio del cáncer, la insuficiencia cardíaca, las enfermedades raras, el Alzeihmer y muchas otras han quedado en vía muerta
El Colegio Oficial de Biólogos de la Comunidad Valenciana (COBCV) denuncia la precaria situación por la que atraviesa el Instituto de Investigación La Fe (IISLaFe) de Valencia después que decenas de investigadores hayan perdido su trabajo con la finalización de sus contratos y sin la posibilidad de su renovación. Hasta el momento se han tenido que marchar a la calle unos 60 investigadores, muchos de ellos biólogos sanitarios, de una plantilla profesional formada por unos 350 investigadores. El pasado mes de febrero de 2019 los investigadores de la IISLaFe de Valencia decidieron salir a la calle para denunciar sus penosas condiciones laborales. La precariedad en el seno de este instituto de investigación sanitario de referencia, no solo en la Comunidad Valenciana sino en el resto de España, abraza la indecencia laboral. La temporalidad roza el 99 % de la plantilla con contratos irregulares asociados a proyectos. Contratos que deberían ser estructurales y permanentes porque la investigación no tiene vocación de ser transitoria y fugaz sino todo lo contrario. El colectivo de investigadores de la Fe de Valencia salió a la calle desde febrero hasta el pasado mes de junio para denunciar este escándalo en la contratación temporal y exigir la regularización de los mismos. Ahora la respuesta de la administración valenciana está siendo dejar morir los contratos para no prolongar el modelo de contratación temporal en fraude de ley. “El Colegio Oficial de Biólogos de la Comunidad Valenciana ha acompañado y secundado desde el primer momento las reivindicaciones del colectivo del Instituto de Investigación La Fe de Valencia porque consideramos que se trata, sin duda, de una situación muy preocupante en cuanto a la precariedad laboral de estos profesionales que repercute directamente en la calidad y en los resultados de sus investigaciones. No podemos olvidar que sus investigaciones tienen que ver directamente con enfermedades como el Alzheimer, el cáncer, o las enfermedades raras y por tanto son de extraordinario interés general para la sociedad”, ha afirmado el decano del COBCV, Ignacio Lacomba.
-Un goteo de despidos
Carolina Gil Cayuela es bióloga sanitaria y colegiada del COBCV. El pasado viernes finalizó su contrato en el Instituto de Investigación La Fe de Valencia después de más de 5 años ininterrumpidos y como otros 60 investigadores ha acabado en la calle porque se ha dejado morir su contrato. Carolina ha investigado sobre la insuficiencia cardíaca y como muchas otras investigaciones ahora está vía muerta. “Yo he investigado sobre insuficiencia cardíaca. Otros estudiaban sobre el cáncer, enfermedades raras o digestivas como la enfermedad del Crohn que afecta a un montón de investigaciones. Muchos de los compañeros y compañeras que han acabado tenían proyectos de investigación asociados. Por ejemplo, imaginemos que se les ha concedido 100 mil euros para que se investigue una enfermedad rara y durante el primer año solo han gastado 20 mil euros. Cuando acaba un contrato de investigación asociado y siguiendo este ejemplo se han de devolver los 80 mil euros de los siguientes años, con todo lo que cuesta conseguir financiación para la investigación en España. Lo cierto es que hay mucha competencia y muy poco dinero porque lamentablemente la investigación en este país no es una prioridad. Cuando se consigue un dinero pero al investigador no se le estabiliza, entonces hay que devolver ese dinero y la investigación se detiene, o bien momentáneamente o para siempre porque esa línea se acaba”, ha indicado Gil con resignación. El Instituto de Investigación La Fe de Valencia cuenta con diversas plataformas diseñadas para dar servicio al conjunto de investigadores. Así por ejemplo hay una plataforma de Genómica, de Microscopia o un Biobanco, entre otros servicios. Se trata de asistencias fundamentales y básicas que facilitan la labor de la investigación. Pero este servicio además de asistencia al trabajo diario de investigadores e investigadoras descongestiona el trabajo del Hospital porque también analiza las muestras de pacientes que tienen algún tipo de enfermedad. La Plataforma de Genómica está despareciendo lenamente, se está quedando vacía de personal. De momento ya se han marchado 6 investigadores. “Pero además de todo esto existen multitud de ensayos clínicos que han parado o van a parar y que repercuten directamente en los pacientes que están siendo tratados y que se están beneficiando de estos ensayos del Instituto. Hablamos muchas veces de tratamientos que están en fase de ensayo, como bien indica la palabra, pero que al mismo tiempo estamos viendo como son muy beneficiosos. Si la investigación se para, también se para el ensayo y esas personas, esos pacientes, dejan de beneficiarse directamente de ese tratamiento que está todavía en fase de prueba”, ha indicado la bióloga sanitaria Carolina Gil. En este contexto de precariedad laboral resuelto por la administración valenciana con la extinción de los contratos de los investigadores de la Fe, el Colegio Oficial de Biólogos de la Comunidad Valenciana hace un llamamiento a los poderes públicos. “Esta situación de despidos nos continúa alarmando. Hacemos un llamamiento a todas las administraciones responsables implicadas para que intenten solventar cuanto antes esta situación para que reincorporen al personal y doten como debe ser todos estos programas de investigación que finalmente son del máximo interés general y son sin lugar a dudas el futuro de nuestra sociedad y de nuestra calidad de vida”, ha remarcado finalmente el decano del COBCV, Ignacio Lacomba.